El mexicano David Gaitán dirige esta versión contemporánea del mito clásico que pretende plantear un desafío intelectual y emotivo al espectador
La actriz Irene Arcos se mete en la piel de Antígona en su debut en el Teatro Romano de Mérida arropada por Fernando Cayo, Clara Sanchís, Isabel Moreno, Elías González, Jorge Mayor y más de 50 figurantes
El director del Festival, Jesús Cimarro, ha asegurado que esta edición especial quiere evidenciar ?el poder estimulante de la cultura en una sociedad abatida? y que será un homenaje ?de principio a fin? a las víctimas de la pandemia y a los profesionales que ayudan a combatirla
Vuelve ?Antígona? al Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida y lo hace en la edición más especial que se recuerda tras la situación que vive el mundo desde hace meses por la pandemia del COVID-19. El estreno de una nueva versión del clásico entre los clásicos grecolatinos, con una lectura más contemporánea, inaugurará así el próximo miércoles la edición número 66 del Festival, una edición algo más reducida de lo habitual, con el 75% del aforo y con todos los protocolos de seguridad y protección que las autoridades sanitarias han marcado, pero que convertirá un año más a la capital de Extremadura en el epicentro de la cultura clásica en el mundo durante cinco semanas.
El director del festival, Jesús Cimarro, ha exaltado esta mañana en Mérida en la presentación del espectáculo inaugural, a la que ha asistido el elenco completo, el poder simbólico de abrir esta edición tan claramente ?singular? con una obra que nos dice tanto sobre nosotros mismos, sobre la política, sobre el presente y sobre la fuerza de las mujeres. ?Antígona se ha representado en más de una docena de ocasiones en este gran escenario de Mérida, pero en esta Antígona vamos a encontrar matices que conectan directamente con nuestros propios dilemas que afectan a lo personal y a lo público?, ha asegurado.
Jesús Cimarro ha reconocido sentirse especialmente emocionado ante la inauguración de esta edición, la novena que dirige, y que la afronta con un mayor sentido de la responsabilidad por lo que representa para el mundo de la cultura, las artes escénicas y la sociedad en general. ?Ha sido muy complicado llegar hasta aquí y sabemos que muchos ojos nos miran para abordar el futuro de los teatros y otros eventos públicos, pero asumimos este reto con ilusión y la satisfacción de contar con la confianza y apoyo de las instituciones y, sobre todo, del público, que no ha dudado en apostar por el Festival de Mérida en sus planes de cultura y ocio este verano?.
?Con esta edición -ha añadido-, queremos evidenciar también el poder estimulante de la cultura en una sociedad abatida?. Además, ha recordado que este 66 Festival de Mérida será de principio a fin un homenaje a las víctimas que ha dejado la pandemia y a todos los profesionales que han luchado y luchan por combatirla o nos han ayudado a resistir de alguna manera.
Por último, ha destacado el hecho de arrancar el Festival con un espectáculo de sello extremeño, una decisión que no es casual y que responde al deseo de significar este año más que nunca el elevado potencial del teatro que se produce en Extremadura y que permite avivar acontecimientos culturales de relevancia mundial como este Festival de Mérida. Así, el Festival coproduce este espectáculo inaugural con la compañía El Desván Teatro y el Teatro Español, para lo que ha contado con la colaboración además de la Embajada d México.
La ?Antígona? de David Gaitán
El director mexicano David Gaitán, que firma también el texto de esta versión, ha armado esta Antígona en torno a una reflexión sobre la democracia, la justicia y las maneras de gobernar para exponer al espectador ante un desafío intelectual y emotivo sobre problemas de su presente. ?Nuestra Antígona no habla tanto de la dicotomía entre leyes divinas y humanas, sino que centra la conversación en torno a las leyes humanas, la libertad, la desobediencia civil, la democracia, la rebeldía, la complejidad?, explica David Gaitán.
Así, la Antígona que nos dibuja es una mujer que duda, que tiene huecos y que no es tanto un emblema de ética y civilidad, sino un ser humano lleno de contradicciones, añade el director. ?La obra busca ser una tesis que combata la tendencia maniquea a entender la vida (sobre todo la política) en blancos y negros. Si a partir de un debate violento sobre el caso de Antígona, logramos meter en problemas a aquel espectador o espectadora que necesite acomodar todo en buenos y malos, la obra estará cumpliendo uno de sus cometidos más importantes?.
Será la actriz Irene Arcos quien dará vida a esta poderosa Antígona de carne y hueso sobre el Teatro Romano de Mérida. La intérprete, que debuta en el festival con este papel, estará arropada en el magno escenario emeritense por Fernando Cayo como Creonte, Clara Sanchís como Sabiduría, Isabel Moreno como Ismene (hermana de Antígona), Elías González en el papel de Guardia y Jorge Mayor como Hemón. Completan el reparto artístico 54 figurantes.
La escenografía concebida por Diego Ramos a partir de la elipse -única figura geométrica en donde los puntos opuestos siempre tienen la misma distancia entre sí que funciona como símbolo del duelo ideológico que en escena representan Antígona y Creonte-, el vestuario de corte contemporáneo, la música original creada por el compositor extremeño Álvaro Rodríguez con anclajes en los ritmos más modernos y la iluminación de Fran Cordero envuelven esta historia inmortal actualizada al siglo XXI.
El espectáculo será plenamente accesible para las personas con diversidad funcional sensorial gracias al sistema de bucle magnético para los espectadores con prótesis auditivas y auriculares para personas con discapacidad auditiva que estarán disponibles en todas las funciones; y subtitulados o audiodescripción en directo para discapacitados auditivos y visuales, respectivamente, que se habilitará los domingos.