Bajo el título Fuegos de Marguerite Yourcenar: recreaciones personales en mitos clásicos, Ramiro González Delgado, catedrático de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Extremadura, inaugura hoy el ciclo de conferencias Encuentro con los clásicos de la Programación Off del 59 Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, con un análisis de las fuentes y motivos que llevaron a Marguerite Yourcenar a establecer paralelismos entre textos grecolatinos y sus propias experiencias vitales.
Fuegos, datada en los denominados ?años griegos? (1935-1937), es fruto de un recorrido de la autora por el Mediterráneo en compañía del poeta griego Andréas Embirikos. Este viaje, cuyo fin era enriquecer conocimientos, lo emprendió por consejo de su editor, André Fraigneau, por el que sentía un amor frustrado. ?André Fraigneau era homosexual, lo que supuso para Yourcenar una decepción amorosa que reflejó en ?Fuegos? en forma de crisis pasional?, narra González Delgado.
La obra conjuga esa vehemencia truncada y la pasión por el helenismo de la autora, notable desde corta edad. ?En su ansia de conocimiento por la cultura clásica se interesó por la Grecia de la Antigüedad, viajando bastante a la península helénica y, en lo literario, interesándose por poetas helenos, como Dimaras o Kavafis?, explica el catedrático. Para conseguir esta combinación, Yourcenar seleccionó nueve personajes con los que compartía desengaños amorosos de diversa índole: el rechazo de Fedra por su hijastro Hipólito, el triste final de los amantes Aquiles y Patroclo, el desconsuelo de Lena por la ignorancia de Harmodio y la justificación de Clitemnestra por eliminar al esposo que la traicionó, entre otros.
?Los héroes y heroínas que recrea poseen cualidades y defectos, dichas y desgracias, sentimientos y pasiones que jamás cambiarán con el paso del tiempo. Son patrimonio del ser humano. Con esos estados de ánimo, producto de desengaños amorosos, se identifica Yourcenar y, por lo tanto, se hacen evidentes los paralelismos metafóricos?, desgrana González Delgado.
?Fuegos? está ?repleta de calidad literaria y cultura profunda?, según el ponente. Él mismo defendió que un amplio conocimiento del mundo helénico permite saborear todo lo que Yourcenar quería decir en una simple oración, pero el carecimiento de esta base no impide el disfrute de la lectura. ?Lo bueno de seguir leyendo, releyendo y estudiando su obra, y eso es lo que me ha pasado a mí, es que siempre descubres algo nuevo en lo que ya has leído con anterioridad, como si se fueran alcanzando nuevos niveles?, asegura.